Medidas tomadas en la actual gestión ayudan a mejorar perfil de algunos impuestos
Combatir la evasión o cualquier vía utilizada por los contribuyentes para evitar el pago de las obligaciones tributarias representa uno de los principales retos para la Dirección General de Impuestos Internos (DGII). La institución estima que el incumplimiento del Impuesto Sobre la Renta (ISR) en empresas y personas físicas supera el 60%.
En el caso del Impuesto sobre la Transferencia de Bienes Industrializados y Servicios (ITBIS), según el director de la DGII, Magín Díaz, la evasión es superior al 42%, la más alta entre 11 países de Centroamérica y América del Sur.
Sin embargo, a juzgar por los resultados, ha habido avances en el combate a la evasión. El ataque frontal a la evasión ha cambiado sustancialmente el perfil recaudador de figuras como el ISR y los selectivos de hidrocarburos y alcoholes. En el período enero-septiembre de 2017 el recaudo por estos gravámenes creció un 24.8%, superando con creces la tasa de incremento del tributo durante los años 2013-2016, que fue de un 11.7%, es decir, 13.1 puntos porcentuales más.
Las medidas administrativas les han dado buenos resultados a la actual gestión si se toma en cuenta que entre septiembre y noviembre de 2016, los ingresos de Impuestos Internos crecieron en promedio un 14%. Díaz atribuyó el resultado a las medidas contra la evasión, la elusión, a las decisiones que crean percepción de riesgo en los contribuyentes y al reenfoque interno hacia la eficiencia.
En los últimos cuatro años los ingresos de la DGII por selectivo a los hidrocarburos crecieron a una tasa de un 2.6%, pero en nueve meses de este año la evolución fue de un 16.7%. Lo que no se sabe si fue por un aumento en el volumen de ventas o por las alzas en los precios de los combustibles. En los alcoholes, el aumento del recaudo pasó de un 0.7% a un 10.3% en los períodos señalados.
En el ITBIS, que según la autoridad registra una evasión del 42%, los resultados indican que en los primeros nueve meses de este año hubo una mejoría de un 1.8%, al pasar de RD$70,034.7 millones, en 2016, a RD$71,314.9 millones en enero-septiembre de 2017. El incremento absoluto fue de RD$1,280.2 millones.
Por concepto del 16% ad-valorem a los hidrocarburos, el recaudo pasó de RD$9,030.6 millones durante enero-septiembre de 2016 a RD$12,120.3 millones en igual período de 2017. Estos resultados establecen que se recaudaron RD$3,089.8 millones más, equivalente a un aumento relativo de un 34.2%. Los ingresos por el impuesto específico pasaron de RD$25,164.5 millones a RD$27,786.1 millones, equivalente a RD$2,621.6 millones, es decir, un 10.4%.
Las recaudaciones por el impuesto a los seguros también estuvieron muy bien en los primeros nueve meses del año. Los resultados indican que crecieron un 9.6%, al pasar de RD$3,632.7 millones a RD$3,982.7 millones en este período, es decir, RD$350 millones.
Respecto al ISR de las personas físicas, la DGII reportó una caída de -7.1% en enero-septiembre, al pasar de RD$1,707.8 millones a RD$1,586.2 millones en los primeros nueve meses de 2017.
La caída absoluta fue de RD$121.5 millones. Sin embargo, los ingresos vía las retenciones de salarios subieron en un 11.5%, pues pasaron de RD$21,869 millones a RD$24,376.9 millones en este lapso.
Los ingresos por retenciones de intereses a las personas físicas también experimentaron un desempeño positivo al crecer un 14.3%. Pasaron de RD$2,414.8 millones a RD$2,760.4 millones, lo que equivale a RD$345.6 millones más que enero-septiembre de 2016.
Según el último reporte de la DGII, las recaudaciones de enero-septiembre 2017 ascendieron a RD$291,892.8 millones, representando un crecimiento absoluto de RD$28,513.1 millones (10.8%) respecto al resultado de los primeros nueve meses de 2016, cuando se recaudaron RD$263,379.7 millones.
El presidente de la Asociación de Empresas Industriales de Herrera (AEIH), Antonio Taveras Guzmán, sostiene que la evasión, impulsada mayormente por la informalidad, no deja de ser un serio problema para el aparato tributario, pero señaló que la elusión tiene características de “catástrofe fiscal” y es necesario enfrentarla.
Fuente: El Dinero
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